Bridging the Families Indigenous Nations Alliance

Por Charlene Muhammad, Corresponsal nacional - marzo 6, 2007

(I-d): Min. Abel Muhammad, Yo’Nas Da Lonewolf McCall-Muhammad, Mujer Guerrera, Dian Moy Muhammad, Julio Lonewolf McCall, Min. Rasul Muhammad (en el podio), Mahpiya Ska Win, Teresa X Torres, Emma Lozano y David Jalil Muhammad.

 

DETROIT (FinalCall.com) - El pasado 24 de febrero, Día del Salvador del 2007, 400 personas saturaron el taller "Enlazando familias - Alianza de Naciones Indígenas” en el Centro de Convenciones Cobo. Quedaron extasiadas por la historia, la cultura y las presentaciones de los panelistas, procedentes de México, Panamá, Puerto Rico, Big Mountain, Arizona, y diversos lugares dentro y fuera de Estados Unidos.

Yo'Nas Da LoneWolf McCall-Muhammad, Directora Nacional de la Alianza de Naciones Indígenas-Movimiento Millones Más y coordinadora y co-moderadora de "Enlazando familias", dejó clara la misión: Empieza hoy mismo, donde estés. Haz la conexión.

La declaración se refiere a un tema general del taller: cómo vincular a los miembros de la Familia Original como uno solo. En concreto, se refiere a vincular los recursos económicos de los Negros en Estados Unidos con los recursos territoriales de las naciones indígenas, en beneficio de la curación y la restauración de ambos grupos.

Hubo un consenso abrumador para eliminar las barreras lingüísticas, de color, culturales y geográficas impuestas por el enemigo.

En su discurso de apertura, Muhammad dijo a los asistentes que los objetivos declarados ese día servían para continuar la labor de su madre, Wauneta LoneWolf. "Estamos hoy aquí para continuar su legado; continuar las enseñanzas del Muy Honorable Elijah Muhammad. También para manifestar hoy el discurso de mañana del Honorable Ministro Louis Farrakhan y hacerlo una realidad", dijo.

Min. Rasul Muhammad, hijo del Muy Honorable Elijah Muhammad y Representante de la Séptima Región, co-moderó la sesión y dio una visión histórica sobre la importancia de los partidarios y miembros latinos de la Nación de Islam.

"Tengo una postura compasiva muy particular respecto a las supuestas personas latinas. Sé de primera mano que el Honorable Elijah Muhammad los valoraba muchísimo, que llevó a una parte de su familia a México y nos puso allí. Y dijo que un día, todos ellos serían musulmanes. Todos ellos son nuestra gente.” –afirmó, mientras imploraba: "¡No seáis invisibles! No silenciéis vuestra voz".

Entre los distinguidos panelistas se encontraban Warrior Woman [Mujer Guerrera] (directora de la Nación de Viento Rojo - Nación Aborigen de Viento Rojo), la hermana Dian Moy Muhammad, la hermana Theresa X Torres (Directora del Ministerio de Prisiones de la Mezquita de Muhammad nº 26B de Oakland, California ), Julio Lonewolf McCall (hijo de Wauneta Lonewolf y orador motivacional), Mahpiya Ska Win (hermana de Wauneta y Coordinadora de Servicios de Apoyo en el Oglala Lakota College) y David Jalil Muhammad (Puerto Rico).

Desde el principio, el Min. Rasul llamó al diálogo basado en soluciones con preguntas para los panelistas, que calaron en los corazones y las mentes de los asistentes, al tiempo que evidenciaron sus reacciones a las preguntas: ¿Cuál es la conexión entre Negro-rojo? ¿Negro-asiático y Negro-latino? El Honorable Ministro Louis Farrakhan citó las palabras del Honorable Elijah Muhammad cuando dijo que la guerra civil estallaría; la sangre comenzaría a ser derramada en la Costa Oeste y se movería a través del país... ¿qué está causando el conflicto latino y Negro desde la Costa Oeste hasta y a través de América?

La hermana Theresa dijo que la violencia entre Negros y morenos ocurre en toda California, especialmente entre las pandillas, porque las prisiones están divididas racialmente, y los criminales dictan la actividad en las calles. "El gobierno de EE.UU. envía agentes a los Hells Angels, así que ¿por qué no enviaría agentes a todos estos hermanos que están perdidos?", planteó.

La hermana Theresa señaló que el derramamiento de sangre ya ha comenzado, e informó que el alcalde de Los Ángeles, Antonio Villaraigosa, ha pedido ayuda al FBI para reprimir la violencia de las bandas. "Tal y como yo lo veo, el Min. Farrakhan intentó hablar, pero va a hacer falta nuestra desobediencia, y Dios va a permitir que esto ocurra. Nada ocurre sin el permiso de Alá", dijo.

El hermano David dijo a los reunidos que el sistema trata a los Negros y a los indígenas con la misma política racista. "Así que cuando se pregunta, ¿cuál es la conexión entre el Negro y el supuesto latino... al igual que usted es el supuesto Negro... la respuesta es ¡que son uno mismo! Sólo el cinco por ciento de todos los Negros traídos al hemisferio occidental acabaron aquí, en EE.UU. El resto está atrapado en América Latina", insistió.

Para el Min. Abel Muhammad, de la mezquita Maryam, el tema del taller encajaba con el discurso de Min. Farrakhan sobre "Una nación bajo Dios". Esto es porque el discurso iba más allá de la diferencia de creencias, también indagaba en las diferencias artificiales basadas en la apariencia, el lugar de residencia y la masa de tierra.

"Es importante que cuando digamos latino, no nos refiramos sólo a México. Al igual que el Negro en Estados Unidos tiene diferentes matices y tonalidades, lo mismo ocurre con el latino. Y cuando representamos de dónde venimos, hay una fuerza en ello", declaró el Min. Abel.

La Mujer Guerrera aprovechó la oportunidad para elevar y recordar los movimientos mundiales por la paz y la libertad. "Nadie puede hablar con Alá más que tú; no hay interpretaciones", recordó a los asistentes mientras forjaban sus resoluciones.

"Mi marido (el jefe Ernie LoneWalker) no ha venido aquí porque está cansado de hablar. Solemos decir que si hablar lograra la revolución, la habríamos tenido ayer... Como guerreros, decimos que es un buen día para morir. Estamos cansados de vivir en el infierno que ellos crearon. No hay marcha atrás. Hay que destruir al enemigo", declaró en medio de una gran ovación.

Dirigiéndose específicamente a los jóvenes con la sabiduría que el Min. Farrakhan le compartió, el Sr. LoneWolf dijo que el gran propósito de asistir a eventos como el Día del Salvador se manifiesta después de las actividades. "Venimos a llevarnos algo de aquí: las herramientas y la educación que te llevas a tu comunidad. Y cuando te lo llevas, no hay más que hablar. Aquí se habla y se escucha. Luego vuelves a casa y eso se extiende".